<h1>Despensas y cocinas II</h1>

Seguimos con la despensas...

Está claro que tenemos que poder acceder y ver lo almacenado, pero además, disponer de ello con la mayor comodidad posible.
Nos gustan los espacios que se utilizan exclusivamente como despenseros y nos encanta ver todo preparado y a disposición para ser usado.

Las imágenes con las que completamos esta semana el post, son un buen ejemplo de esos espacios que hemos comentado, únicos y dedicados al almacenaje. Aquí ya no hablamos de muebles para despensa, con baldas o cajones en los que distribuimos los enseres. Ahora, se trata de diseñar un hueco de nuestro hogar lo mejor posible, para alojar la despensa de nuestros sueños.

Orden, comodidad, servicio óptimo, volumen, color, etcétera. Creemos que estas imágenes demuestran que se pueden obtener buenos resultados al diseñar un trastero, un lavadero, o una despensa, siempre que tengamos en cuenta los mismos valores que emplearíamos si de nuestra mejor estancia de la casa se tratara.

Queremos que los espacios, las formas y los volúmenes, sean más y más protagonistas.

Al proyectar, es importante cualquier detalle pero sólo, si se contempla dentro de esa globalidad.

Baldas para tener siempre a la vista lo que necesitamos. Si además añadimos cestos con ruedas para desplazar los utensilios de más peso, mucho mejor. Importante que esas baldas, ocupadas, estén perfectamente ordenadas y que situemos todo, lo más cómodo posible para que nos resulte sencillo acceder a lo que busquemos.

...Y si tenemos suficiente altura en nuestra cocina.
Forma muy original de almacenar los "cacharros". No ocupan sitio y además decoran y equilibran el espacio. Los 2 carros del fondo de la imagen, aportan una opción de movilidad para que tengamos los elementos que utilizamos habitualmente muy a mano. No perder de vista las alfombras que decoran el suelo.

Además de almacenar comida, útiles de limpieza y demás enseres propios de las labores diarias, también en muchas ocasiones, podemos disponer nuestra vajilla y todos sus complementos. Y si lo tenemos a la vista, mejor que mejor. Volvemos a ver espacios dedicados exclusivamente a despensas. Ya no son  armarios pequeños los que destinamos a tal menester.

Ejemplo de colocación, orden y sencillez. Tenemos muy a mano lo necesario, con unas baldas básicas y sin una decoración importante. Sin embargo, el fondo de color de la pared y el haber separado las baldas de la misma,  nos dan una profundidad muy importante a la "despensa" que hemos creado.

Aunque no se trate de una cocina, nos parecía que, de alguna manera, forma parte de la misma. En realidad pertenece a un office cercano que se ha aprovechado para decorar con complementos más propios del salón. Aún así, si se hubiese dedicado a enseres de la cocina, creemos que el resultado habría sido similar.Los espacios están muy definidos pero, al mismo tiempo se fusionan y se integran sin problemas.

Las dos imágenes pertenecen a la misma cocina. En la superior vemos una perspectiva general con una gran mesa que preside toda la estancia. En primer término se aprecia parte de la despensa, que vemos con detalle en la imagen segunda. Aquí observamos lineas más suaves debido al material utilizado para construir las baldas. La cristalería, también aligera la sensación de agobio.

Imagen que nos ha parecido curiosa. Como despensa no aporta mucho, salvo que dispongamos de infinidad de envases de mismo producto para almacenar. Sin embargo, si no sabemos donde guardar esos envases, como decoración quedan muy originales. Me gusta.